sábado, 27 de octubre de 2012


El conformista



Desde mi punto de vista el aspecto más sobresaliente de la película el conformista, desarrollada durante la Italia fascista, es que nos muestra como el personaje principal Marcelo Clerici, quien se desempeña como funcionario de estado, desempeña sus funciones sin una ideología, sin cuestionar nada, simplemente obedeciendo las ordenes de sus superiores, incluso en algunas partes de la película me pareciera que contrario a lo que el deseaba.

Su falta de ideologia se ve reforzada cuando especificamente el coronel le pregunta porque quiere colaborar con los fascistas, si es por dinero, por miedo o por ideales, cuales son sus motivos para estar con ellos, y el unicamente responde que esta dispuesto a adherirse enseguida. 

lunes, 22 de octubre de 2012

Trece días


La película 13 días, nos sitúa en 1962, cuando las fuerzas militares de Estados Unidos se dan cuenta, mediante fotografías aéreas, de que los soviéticos están introduciendo, de forma secreta, misiles dentro del territorio de Cuba.
Situación que los ponía en riesgo ya que por la distancia y posición en la que podían ser colocados los mismos, estos podrían haber causado mucho daño a su país.
El presidente Kennedy, se encuentra ante dos opciones: a) el atacar para tener de cierto modo el “factor sorpresa” de su lado y así evitar que sean atacados, pero teniendo como posible consecuencia, ser atacados posteriormente por los soviéticos, y b) la opción del bloqueo a Cuba.  
Consideró que el aspecto más relevante de la película, es como se llevan a cabo las reuniones y como el que este asesorado por determinadas personas, termino por evitar otra posible guerra.

miércoles, 10 de octubre de 2012


En un mundo globalizado ¿existe la soberanía estatal?
Etimológicamente soberanía significa lo que está encima de todo, derivado de súper- sobre y omnia- todo.
Dicho concepto atribuido al poder estatal nació como justificación doctrinaria del absolutismo y el primer doctrinario en utilizarlo en ese sentido fue Juan Bodino, quien lo entendía como el poder supremo que reina entre los súbditos y ciudadanos sin restricciones legales.
Diversos autores nos brindaron sus conceptos de soberanía, sin embargo uno de los cambios más importantes y que generó una real evolución de lo que se entendía por soberanía hasta esos momentos, fueron las revoluciones liberales y democráticas de finales del siglo XVIII, ya que a raíz de estas se transfirió la legitimidad política al pueblo. Y se convirtió a la soberanía como una de las bases de la organización de los Estados.
A lo largo del siglo XIX, dicho concepto influyó de forma determinante en la configuración de los nuevos Estados, ya que se les reconocía el derecho de auto determinarse política y jurídicamente, ejerciendo en sus territorios su potestad política.
Sin embargo, en las últimas décadas, han ocurrido diversos cambios que han generado que la autodeterminación que los Estados ejercían tanto hacia su interior, como al exterior sea cada vez menor.
Entre los cambios más sobresalientes podemos encontrar los siguientes:
1.- La cada vez mayor integración de las economías nacionales y la creciente constitución de empresas trasnacionales que ha generado que las barreras de los estados sean menores, para poder mantener acuerdos inter estatales y como consecuencia seguir manteniendo economías competitivas.
2.- La creación y cada vez mayor importancia de los organismos internacionales, que en materia de soberanía han generado que los países tengan que adaptar sus legislaciones  para cumplir con sus obligaciones internacionales.
3.- Las demandas de la sociedad por igualdad de derechos y de oportunidades
4.- Las tecnologías que permiten tener una comunicación instantánea con personas de diversas partes del mundo.
Desde mi punto de vista, si bien estos cambios han sido fuertes, y han hecho que el concepto de soberanía de los estados que conocíamos anteriormente sufra cambios. El mismo va a seguir existiendo. Ya que, si bien han tenido que hacer ciertas concesiones y adaptarse tanto interna como externamente a las nuevas organizaciones internacionales, a las nuevas demandas sociales, económicas y culturales. Lo cierto es que siguen siendo los propios estados quienes deciden como y en qué medida adaptarse a dichas demandas.